No toda la gente que pasa por tu vida tiene porque quedarse...
Una lealtad forzada al menos para mi, no funciona, no tiene una base que la justifique.
Hay bonitos recuerdos que pueden haberse creado con un grupo de gente que estuvo ahí con una función pasajera, son esas personas que te han conocido siendo muy joven, pero los caminos se separan simplemente porque la vida nos coloca identidades simplemente incompatibles.
A veces la gente tiene la extraña idea de que aparecer de la nada, hará que automáticamente los afectos que se abandonaron en una esquina y se cubrieron de polvo, volverán a brillar y que los lazos se reanudarán como por arte de magia.
Y la magia si existe, está ahí en nuestras vidas, pero se construye a diario con la gente que amas, con la que discutes, discrepas, te conflictuas y con la que luego hablas, te juntas para tomar un café o unas cervezas, re-construyes y te reconcilias.
Me alegra que algunas personas que me conocieron en otra época tenga un lindo recuerdo de mi, o al menos espero que así sea y que el fantasma de mi paso por sus vidas sea amigable como Gasparín!
Pero honestamente, me gusta mucho más relacionarme con la gente de carne y hueso más que con los espectros de un pasado que ya fue!!!
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