
Duro silencio el que nos deja la muerte
y grato escándalo en el corazón cuando la planificas,
pese a lo que alguna vez creí imposible,
me he percatado que todos somos asesinos,
a mi 22 años recuerdo claramente,
un hombre barabado me dijo, mientras lloraba
que debo "matarla",
me horroricé, me escandalicé
y no podía entender que quizo decir,
y es que en todo este tiempo
he esperado pacientemente lo milagroso,
he estado atenta a mínimas señales
que me hagan creer que soy tu hija.
Sin encontrar respuesta,
es como si me hubiese tragado un cañón
y con él el eco que se crea
se escucha tu voz intensificada,
gritando para lastimarme,
se escucha tu desaliento
y el no encontrar en mi lo que has querido.
Yo no soy "una damita"
que vive para los demás,
no me sumerjo en el que dirán otros
para tomar decisiones,
soy lo que soy y creeme
NO ME CONOCES
no soy lo que piensas
a veces por las noches
tejo sin quererlo estrategias
dignas del mejor asesino en serie
que me permitan tenerte en mis manos
y una vez ahí
extrangularte tan fuerte
que pueda presenciar como cambia tu rostro
hasta que finalmente te halles
lejos de TODO lo que has tocado para corromper.
He pensado en varias armas,
varios escenarios,
diferentes atuendos y finamente
me he percatado
que la mejor forma de matarte
es no verte, no escucharte
y arrancarte de mis genes
como tú lo has hecho de tu matriz rechazante
las mil veces que me has abortado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario